OBY
El espejo no mentia, ahi estaba de frente y tras de el una treintañera obesa,
- que linda cara, que hermosos ojos, que boca tan apetecible tengo- Oby se respondia .
Hacia cuentas de los amantes con quienes habia compartido la cama, algunos de una noche, los menos de noche y alba, acaso 3 o 4 de de un poco mas alla del desayuno, entre esos uno que venia mas por el placer de la alacena que el por el placer de la carne.
-Se reia y musitaba,- pero era simpatico el tragon.
Aun no despertaba el dia, y tomando su rosario, murmuraba con devocion sus oraciones, sus preferidos los Salmos, los recitaba de memoria, cuando prende el dia y cuando se acaba, salvo que hubiera un compañero de cama este era preferente a sus queridos Salmos.
Aquella mañana , su lecho era solo para ella.
Y se entrego con vehemencia y religiosidad de viuda a sus oraciones, " Padre nuestro...Ave María...y como corolario el Salmo , aquel que reza...tú eres mi pastor, a tu lado nada me faltara, entre aguas pantanosas..."
Cuando concluyó el Sol tocaba a gritos por la ventana del pequeño cuarto que hacia de veces de dormitorio, biblioteca, estudio, sala de descanso, sala de visitas.
Movió la persiana para que el Dios pagano iluminara hasta el ultimo rincón de su pequeña estancia.
Hacia quince años ya, desde que llego a la gran ciudad, en busca de ser alguien, de buscar un lugar, de cumplir sueños, ...y de huir de un hombre abusivo...su padre.
Evitaba recordar aquellos tiempos de familia tradicional, La mamá, los hermanos...y el papá.
Habia perdido contacto con ese mundo de muchos ayeres, en cuanto tuvo fuerzas y un poco de plata, tomo el primer camión y dejo atrás ese mundo de cuento, de cuento de terror.
Cerro los ojos humedos y se entrego al tarareo de la cancion que tocaba su ordenador
" ...si en los sueños me llega el terror
se que dormido puedo encontrar todo el valor
si la noche se oscurece me enciendo
en la casa me defiendo del miedo
contra toda maldad yo me arreglo..."
- que linda cara, que hermosos ojos, que boca tan apetecible tengo- Oby se respondia .
Hacia cuentas de los amantes con quienes habia compartido la cama, algunos de una noche, los menos de noche y alba, acaso 3 o 4 de de un poco mas alla del desayuno, entre esos uno que venia mas por el placer de la alacena que el por el placer de la carne.
-Se reia y musitaba,- pero era simpatico el tragon.
Aun no despertaba el dia, y tomando su rosario, murmuraba con devocion sus oraciones, sus preferidos los Salmos, los recitaba de memoria, cuando prende el dia y cuando se acaba, salvo que hubiera un compañero de cama este era preferente a sus queridos Salmos.
Aquella mañana , su lecho era solo para ella.
Y se entrego con vehemencia y religiosidad de viuda a sus oraciones, " Padre nuestro...Ave María...y como corolario el Salmo , aquel que reza...tú eres mi pastor, a tu lado nada me faltara, entre aguas pantanosas..."
Cuando concluyó el Sol tocaba a gritos por la ventana del pequeño cuarto que hacia de veces de dormitorio, biblioteca, estudio, sala de descanso, sala de visitas.
Movió la persiana para que el Dios pagano iluminara hasta el ultimo rincón de su pequeña estancia.
Hacia quince años ya, desde que llego a la gran ciudad, en busca de ser alguien, de buscar un lugar, de cumplir sueños, ...y de huir de un hombre abusivo...su padre.
Evitaba recordar aquellos tiempos de familia tradicional, La mamá, los hermanos...y el papá.
Habia perdido contacto con ese mundo de muchos ayeres, en cuanto tuvo fuerzas y un poco de plata, tomo el primer camión y dejo atrás ese mundo de cuento, de cuento de terror.
Cerro los ojos humedos y se entrego al tarareo de la cancion que tocaba su ordenador
" ...si en los sueños me llega el terror
se que dormido puedo encontrar todo el valor
si la noche se oscurece me enciendo
en la casa me defiendo del miedo
contra toda maldad yo me arreglo..."
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